Bodegas Fariña - Enoturismo

La amplia gama de vinos con una marcada personalidad y con el carácter de la zona, ha sido clave para que esta bodega sea una de las más atractivas del panorama vitivinícola español

Descripción

Fundado en 1942, la bodega familiar de Fariña goza del reconocimiento de haber sido uno de los principales artífices del
desarrollo de la D.O. Toro. La continua innovación dirigida a una producción de calidad, el respeto al terruño, y el profundo conocimiento de la variedad autóctona, la TINTA DE TORO, han sido pilares fundamentales de su filosofía enológica. Por eso están reconocidos como uno de los mejores productores de vino de Toro.

LA BODEGA
Un paisaje de viñas viejas, posiblemente de las más viejas de España, y una construcción exterior inspirada en la arquitectura tradicional, contrastan con la alta tecnología del interior de una bodega que representa por sí misma el equilibrio entre tradición y modernidad que Fariña ha mantenido en toda su trayectoria.
Sus depósitos de elaboración de acero inoxidable y el sistema de control de temperatura en la fermentación daban fe, ya hace casi treinta años (los primeros en la región), del espíritu vanguardista de Fariña.
Un espléndido edificio de dos plantas, con los techos en madera laminada, alberga en su interior la sala de crianza.
Su atractiva estética y el riguroso control de temperatura y humedad, permiten intuir la importancia que Fariña otorga al envejecimiento de sus vinos. A cinco metros de profundidad, un parque de más de 2.500 barricas de roble francés y americano, dotarán a los crianzas de Fariña de una buena parte de su marcada personalidad.